Aparadores de cocina
Los aparadores de cocina responden a una necesidad específica de almacenamiento en un espacio sometido a las limitaciones de la limpieza diaria. Su estructura permite organizar utensilios, vajilla o alimentos no perecederos, liberando al mismo tiempo superficies de trabajo. Los formatos varían en función de la superficie disponible, con o sin nicho alto, y con estantes abiertos o cerrados. Como complemento de una cocina o un comedor lineales, el aparador de cocina estructura el espacio y distribuye las funciones sin sobrecargar visualmente. leer más >
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Buffet de roble claroFiska
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Buffet de nogalHemët
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Aparador de nogalNeliö
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Funciones y disposición del aparador de cocina
El aparador de cocina destaca por su finalidad estrictamente funcional, ligada a las necesidades específicas de esta estancia. Ofrece volúmenes cerrados o mixtos, a menudo segmentados para alojar objetos de diferentes tamaños y frecuencia de uso. Puede servir para guardar platos, vasos, ollas y sartenes o electrodomésticos de uso poco frecuente. Algunos modelos cuentan con una sección alta, que permite acceder directamente a objetos ligeros como especias, tarros o recipientes pequeños. Puede colocarse adosado a una pared libre, aislado al final de una estancia o situado en continuidad con el mobiliario principal.
Organización interior y acabados adaptados
El aparador de cocina ofrece un almacenamiento estructurado, a menudo compuesto por estantes regulables, cajones profundos o módulos específicos. La organización pretende optimizar la accesibilidad sin interrumpir la circulación. El material desempeña un papel tanto funcional como estético. Las superficies suelen estar diseñadas para resistir roces, salpicaduras y manipulaciones frecuentes. Son habituales la madera barnizada, el laminado y el metal pintado, elegidos por su facilidad de mantenimiento. Los colores se mantienen sobrios para limitar el desorden visual, en consonancia con el equipamiento de cocina, a menudo blanco, negro o de acero inoxidable.
Integración en la distribución general
El aparador de cocina actúa como elemento complementario en un conjunto más amplio. Descarga los armarios altos o bajos de la estantería principal, proporcionando un espacio de almacenamiento independiente. En las cocinas abiertas, también puede servir de transición hacia el comedor o el salón. Un aparador bajo, alineado con una isla o mesa, proporciona una ligera separación sin cerrar el espacio. Su colocación depende directamente de las limitaciones de circulación, del espacio disponible y del nivel de actividad de la estancia.
El aparador de cocina se adapta a un uso cotidiano concreto. Combina utilidad directa, capacidad de almacenamiento y coherencia formal con el entorno culinario y la circulación asociada.
El aparador de cocina se ajusta a un uso cotidiano específico