Sillones de interior
Los sillones de interior incluyen asientos fijos o móviles diseñados para un uso doméstico habitual. Compactos, envolventes o modulares, se adaptan a diferentes estancias: salón, dormitorio, pasillo, despacho. Cada sillón ofrece una postura adaptada a su contexto de uso: recepción, lectura, transición o descanso prolongado. La categoría de sillones de interior reúne una amplia gama de modelos diseñados para estructurar el espacio sin sobrecargarlo. Su colocación depende de las limitaciones funcionales y de los materiales ya presentes. leer más >
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Sillón de cuero de plena flor color avellanaNeoturner
895 € 739 €-15%

Sillón de cuero avellanaRed Baron
1080 € 920 €-15%

Sillón de cuero camelRed Baron
1080 € 810 €-25%

Sillón lounge de telaHilda
495 € 345 €-30%
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Sillón de terciopelo naranjaElbrousse
495 € 395 €-20%

Sillón de telaSilkeborg
820 € 620 €-25%

Sillón de terciopelo azulViela
995 € 695 €-30%

Sillón de cuero grisHamar
1880 € 1345 €-30%

Sillón de cuero negroRed Baron
1280 € 895 €-30%

Sillón de tres patasWellinfield
580 € 405 €-30%

Sillón giratorio de terciopelo antracitaBalmat
590 € 455 €-25%

Sillón chesterfield de cuero marrónJahn
2680 € 1875 €-30%

Sillón de terciopelo grisBrompton
880 € 690 €-20%

Sillón club de cuero camelRockefeller
1395 € 1255 €-10%

Sillón chesterfield de cuero color gamuzaSaint Paul
2680 € 1920 €-30%

Sillón de cuero color camelloKrieger
2480 € 2110 €-15%

Sillón giratorio de terciopelo amarilloBalmat
590 € 470 €-20%
Mejores ventas

Sillones de interior: tipos y funciones según el espacio
Los sillones de interior son de varios tipos según su uso principal y la ubicación prevista. Algunos modelos están pensados para el salón, como complemento de un sofá o una mesa de centro. Otros están pensados para espacios de transición: recibidor, rellano, zona de oficina. Su papel es a la vez funcional, como asiento ocasional o prolongado, y espacial, definiendo, puntuando o equilibrando una disposición existente. Por tanto, la elección depende de la habitación, del volumen disponible y del ritmo del espacio vital.
En un dormitorio, un sillón puede servir de asiento secundario o de retiro temporal. En una oficina doméstica, ofrece una alternativa a la silla de trabajo, sobre todo para los momentos de lectura o las pausas. Algunos modelos son independientes y están aislados, mientras que otros forman parte de un conjunto que se funde con el resto del mobiliario. Como suelen ser más pequeños que los sofás, los sillones de interior ofrecen una mayor flexibilidad de diseño, al tiempo que ayudan a estructurar el espacio.
Materiales, formas y niveles de confort
Los sillones de interior utilizan una gran variedad de materiales en función de su uso y ubicación. Las estructuras pueden ser de madera vista, metal pintado o estar completamente recubiertas de espuma y tela. Los revestimientos van desde el algodón tejido hasta el cuero estirado, el terciopelo, la lana o los tejidos técnicos. La comodidad depende de la densidad de la tapicería, el ángulo del respaldo y la existencia o no de reposabrazos.
Los modelos más envolventes son adecuados para un uso prolongado: leer, descansar, recibir invitados. Los formatos compactos se adaptan mejor a un uso frecuente o a espacios reducidos. Algunos sillones son giratorios, otros fijos. Los asientos pueden ser firmes o mullidos, con o sin cojines independientes. La altura de los asientos varía de un modelo a otro, lo que influye en la postura: erguida y activa o relajada y baja.
Integración visual y lógica de distribución
Una silla de interior no se elige sólo por su forma. Debe encajar en la lógica de distribución de un espacio, sin crear una ruptura innecesaria. El color, el material, la altura del respaldo y el diseño de la base influyen en cómo se percibe en la habitación. Puede hacerse eco de otros elementos como la mesa, la iluminación o las cortinas o, por el contrario, introducir una variación formal deliberada. Su función sigue siendo clara: acoger, apoyar y puntuar el uso.
En una composición simétrica (dos sillones frente a un sofá), crea una estructura de intercambio. Colocado solo en un rincón o cerca de una ventana, sirve de punto fijo secundario. El sillón de interior se utiliza a menudo para equilibrar una habitación o llenar una zona infrautilizada. En conclusión, los sillones de interior ofrecen una respuesta adecuada a una variedad de necesidades, al tiempo que garantizan su perfecta integración en los espacios domésticos. Su selección se basa tanto en las limitaciones espaciales como en la claridad de su función en la distribución general.
En conclusión, los sillones de interior ofrecen una respuesta adecuada a una variedad de necesidades, al tiempo que garantizan que se integran perfectamente en los espacios domésticos