Sofás grises
Los sofás grises ofrecen una base visual neutra, adecuada para composiciones sobrias o contrastadas. Según el tejido, pueden ser de un color frío o cálido que apenas cambia la percepción del espacio. Colocados en el centro del salón o contra una pared, se integran en el entorno sin crear sensación de ruptura. Esta categoría incluye modelos de líneas variadas, con o sin reposabrazos. El sofá gris está diseñado para ser funcional, con una amplia gama de materiales. leer más >
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Sofá Chesterfield de 2 plazas de lino y algodón grisMontaigu
1480 € 1260 €-15%

Sofá de 3 plazas de cuero grisHamar
3180 € 2705 €-15%

Sofá de dos plazas de cuero grisAlmond
3480 € 2540 €-25%

Sofá de tres plazas de cuero grisAlmond
4280 € 3395 €-20%
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Sofá de 2 plazas de telaSilkeborg
1285 € 1155 €-10%

Sofá redondo de 3 plazas de terciopelo grisOlson
2180 € 1960 €-10%

Sofá de 3 plazasSilkeborg
1585 € 1425 €-10%

Sofá redondo de terciopelo grisOlson
1685 € 1515 €-10%
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Lee sobre la neutralidad funcional de un sofá gris
El sofá gris se inscribe en una lógica de neutralidad visual. Ayuda a estructurar un espacio sin imponer un color dominante. El gris, en sus tonalidades claras, medias o antracita, actúa como modulador del contraste en una habitación. Puede combinarse con suelos claros, paredes blancas, textiles de colores o materias primas como el hormigón, el metal o la madera. Gracias a esta flexibilidad, el sofá gris puede integrarse en ambientes muy diferentes, desde salones clásicos hasta salones más gráficos. Actúa como punto de partida o enlace en una distribución, sin tomar el control visual de la misma.
Formas, revestimientos y percepción de volúmenes
Los sofás grises se presentan en formatos rectos, colgantes o modulares. La estructura puede ser baja, con un respaldo lineal, o más envolvente, con volúmenes definidos. El tejido elegido influye en la percepción global: un gris en lino crudo será más difuso, un gris en terciopelo acentuará los relieves. El cuero, a menudo gris oscuro, es más denso y formal. La elección de la tapicería debe tener en cuenta las fuentes de luz natural, el material de los elementos adyacentes y el nivel de uso diario. La base, visible o no, contribuye a aligerar o reforzar visualmente el conjunto.
Implantación y articulación con los demás elementos
Un sofá gris se instala en un salón según una lógica centrada en la circulación y el uso. Puede colocarse contra una pared o en el centro para estructurar un espacio abierto. Combinado con una mesa de centro, una alfombra o una iluminación regulable, define una zona de asiento sin sobrecargar el espacio. Los accesorios textiles (cojines, plaids) introducen acentos de color sin alterar la coherencia del conjunto. En cambio, en un interior muy neutro, puede servir para estabilizar el conjunto. Su posición depende de su relación con los muebles fijos, de las vías de acceso y del papel que desempeñe en la jerarquía de la habitación.
El sofá gris puede servir para organizar un espacio de vida sin interrumpir las líneas principales ni imponer un efecto decorativo. Su color, proporciones y acabados lo hacen compatible con una variedad de contextos visuales, como parte de un enfoque controlado para el uso diario.
El sofá gris se puede utilizar para organizar un espacio de vida sin interrumpir las líneas principales o imponer un efecto decorativo