Comedor

En un comedor, la mesa es el mueble central. Debe responder a criterios precisos de tamaño para adaptarse al espacio de que disponga y permitir al mismo tiempo una circulación fluida a su alrededor. Los materiales varían, desde la madera maciza por su resistencia y calidez hasta el cristal para un toque moderno y ligero. Las formas - rectangular, redonda u ovalada - influyen en el uso y el ambiente. Una mesa ovalada puede facilitar la comunicación a la hora de comer al eliminar esquinas y ofrecer continuidad visual.

Las sillas no sólo deben complementar a la mesa en estilo y material, sino también ofrecer un confort adecuado para largos periodos sentados. Los conceptos ergonómicos son aquí esenciales. Existen diferentes tapizados y revestimientos para satisfacer las preferencias en cuanto a comodidad y mantenimiento, desde cuero duradero hasta telas más variadas en cuanto a elección de colores y estampados. La altura del respaldo y la profundidad del asiento desempeñan un papel clave en el confort.

Los muebles complementarios, como aparadores o vitrinas, añaden almacenamiento. La elección de materiales y acabados debe complementar la estética de la mesa y las sillas para conseguir un Comedor homogéneo. Un aparador de madera puede aportar coherencia visual a una estancia dominada por elementos de madera. Las vitrinas protegen la vajilla a la vez que permiten la exposición visual, por lo que el cristal y la iluminación interior influyen en la exposición de los objetos.

En conclusión, el Comedor es un espacio funcional que se beneficia de una disposición meditada y de una elección de materiales y formas en armonía, que influyen no sólo en la estética sino también en el uso cotidiano de este espacio vital.

La elección de materiales y acabados debe complementar la estética de la mesa y las sillas para conseguir una estancia homogénea